viernes, 13 de junio de 2014

Día 7

Cherán 
Los niños jugando con Juan
Ensayando 
Ensayando los ninjas
Jugando con la máscara
Introduciéndonos en el Clown
Escribiendo los guiones
Haciendonos las máscaras
Soplandoles!
Máscara afuera! 
El resultado!
Y luego...
Hoy amaneció con tal rico sol que daba gusto caminar por las silenciosas calles de Cheran rumbo al comedor comunal en busca de nuestro desayuno. Alli, como todos los días, un numeroso grupo de mujeres nos recibieron alegres con un guisado para arrancar el día enérgicos. En la mesa tuvimos el gusto de cruzarnos con algunos de los niños que por la tarde vendrían al taller y que desayunan previo ir a la escuela.
Por la mañana, aprovechando el sol, con el grupo nos sentamos en el jardin de la casa en la que estamos a recortar los dibujos de los niños para hacer animaciones y proyectarlas en la escenografía de la función del domingo. Fue una linda mañana de compartir mates y charlas, observando gustosos los dibujos.
Luego sali a conocer un poco el pueblo y perderme en él por primera vez con mi cámara. Pude ver y sentir la paz y tranquilidad con la que se vive en este pueblo sin la contaminación de insignias de partidos políticos, ni propagandas excesivas de productos. Siempre teniendo por horizonte los cerros envueltos de pinos y su olor en las calles.
Finalmente llegue a la iglesia del Calvario, aquella donde comenzó la lucha por la recuperación de los bosques y me dieron la posibilidad de subir al campanario y observar desde alli una panorámica del pueblo de Cheran. Un buen punto de vista para observar también aquellos cerros con agujeros producidos por los talamontes.
Una vez en la jornada con los niños, comenzamos con el círculo en el que los niños nos y se contaban entre si, como había sido su día y como se sentían. La mayoría reconoció que había sido regañada. Gratamente en la medida que los niños comentaban, los más grandes de manera autónoma se movian en el circulo para desarmar aquellos focos de distracción y mal comportamiento promoviendo que el círculo fluyera sin interrupciones.
Luego, el buen funcionamiento del grupo continuó con ensayos grupales sin la intervención de guías. Los niños solos se organizaron para ensayar responsablemente visionando que en 4 días llegaba la función. Luego pasaron al aula por grupos y nos enseñaron a todos el resultado de dichos ensayos. Fue la primera vez que se pasó la obra completa y se ve muy fuerte ese esqueleto. Los niños han quedado entusiasmados con su trabajo y felices con nuestros aplausos.
Al terminar con la obra, Nano introdujo a los niños al teatro de máscara y luego al de la máscara más pequeña de todas: el clown. Los niños se han divertido como nunca pasando al frente sin temores y también como público activo y entusiasta. Con la máscara los niños han cambiado su presencia en el escenario, su seguridad, sus ideas. Fue un momento muy feliz y yo creo que de muchas nuevas herramientas para ellos.
Luego del receso, mientras cada grupo siguió ensayando ya con sus respectivos guias y en el caso del grupo guiado por Gabo y Adrián escribiendo el guión final, el grupo de escenografía que había continuado con los dibujos para la realización de atmósferas en la obra, se encontró con la sorpresa de hacerles las máscaras al grupo de ninjas reforestadores. Esta ha sido una actividad muy entretenida donde los niños han aprendido a trabajar con vendas de yeso para hacer máscaras a su medida. Luego de darles algunas indicaciones, ellos mismos se moldearon las caras como momias unos a otros y se soplaron y ventilaron hasta que se sequen hasta tener el resultado de sus caras en las vendas de yeso. Han quedado embobados con la forma de sus narices, de sus mentones. Mañana es el día de agregarles expresion con papel de diario y pintarlas!
Finalmente, hicimos el círculo de cierre donde ellos pudieron notar como habian utilizado las 3 Cs en el día: el coraje para quedarse unos 20 minutos quietos dejando exponer sus caras al yeso o para organizarse y ensayar solos; la compasión para comprometerse con el trabajo del grupo y no perjudicar a sus compañeros con sus distracciones y desertaciones; y la creatividad para seguir dia a dia haciendo cosas nuevas y agregandoles detalles a sus respectivos sketches como por ejemplo el grupo de árboles del bosque en el que finalmente Abraham dice "todos somos el bosque" y al decirlo en el ensayo se da cuenta de que si todos somos el bosque, lo deberían de decir todos. Todos sus compañeros de acuerdo con la propuesta acceden al cambio del guión.
Luego de limpiar el desorden del yeso y dejar el aula como la recibimos, nos fuimos a relajar viendo una hermosa puesta de sol entre las montañas para luego ir a comer un abundante pozole hecho por las doñas para luego si quedar listos para ir a descarsar para un nuevo día en esta linda experiencia que nos regala Cheran y su gente.


Sebastián Labaronne 

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